Controlar el peso no es suficiente: la importancia de la composición analista corporal oce
Salvo los de tipo trans, estos demostraron incrementar los niveles de inflamación en el organismo. Para acabar hay que realizar referencia a 2 compartimentos que prácticamente no se pueden modificar a través de los hábitos, contando así con una determinación genética importante. Son la masa ósea y la masa residual, haciendo referencia esta última al conjunto de órganos y de tejidos que están en el interior del cuerpo humano. El centrarse únicamente en la dieta o el ejercicio para adelgazar o mantenerse saludable podría no ser la respuesta.
TAC – Tomografía Axial Computarizada
Para ello se usan diferentes métodos de medición, ciertos mucho más precisos que otros. El índice cintura-cadera (IC-C) es una medida antropométrica específica para medir los escenarios de grasa intraabdominal; relaciona el perímetro de la cintura con el de la cadera (en centímetros) y dependiendo del resultado se estima si hay riesgo cardiovascular. "Si una mujer tiene un índice mayor a 80 cm o un varón por encima de 90 cm su peligro es elevado", enseña la experto. El IMC es una medida estándar del estado sobre nutrición global y pese a sus restricciones, todavía es una medida fácil de obtener y muy utilizada, si bien el problema es que no discrimina entre masa magra, agua o masa grasa. El tratamiento de la obesidad debe enfocarse de forma integral y adaptada, considerando múltiples aspectos del modo de vida y las necesidades individuales de cada tolerante.
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Nos deja entender de qué manera se relacionan las diferentes unas partes del cuerpo y cómo marchan juntas para mantener un estado de equilibrio y bienestar. Entender los planos anatómicos es primordial para el estudio de la anatomía humana. Nos permite ver y comprender cómo están organizadas las diferentes unas partes del cuerpo, lo que posibilita la identificación y el análisis de construcciones y sistemas concretos. Debido a que la distribución de la grasa subcutánea no es uniforme se deberán efectuar diferentes mediciones a lo largo de todo el cuerpo para obtener unos datos más fiables. A partir de la medida de los pliegues cutáneos se puede deducir la consistencia corporal usando ciertas ecuaciones matemáticas, como la ecuación de SIRI. Estos métodos también son técnicas para deducir la composición corporal in vivo y acostumbran a estar validadas desde los métodos indirectos, o sea, presentan un margen de error mucho más grande que los propios métodos indirectos.
Métodos de evaluación de la composición corporal
En términos muy simples, los dos componentes principales de su cuerpo son la masa grasa y la masa magra (músculos, huesos, órganos y agua). La distribución de estos 2 tipos de masa corporal es de gran concepto para su salud. Entender de qué forma su composición corporal puede impactarle, aparte de aprender a de qué manera optimizarla, le ayudará a descuidarse del número en la báscula. Indagaciones recientes han demostrado que la cantidad de masa muscular se relaciona de manera inversamente proporcional con el riesgo cardiovascular tanto en hombres como en mujeres (incluso mucho más en estas últimas). De allí que la composición corporal esté tomando una importancia creciente en la práctica clínica actual y que los diferentes métodos para el Antes de Cristose empleen como aporte importante a la práctica clínica cotidiana de la medicina de la obesidad y la del deporte. Además de esto, cuantificar estos hallazgos, entender cómo se relacionan proporcionalmente y comprender la agilidad en que se ganan o pierden uno u otro en todo el ciclo vital, sí permite acercarnos a la fisiopatología de la obesidad y correlacionarla con los factores de riesgo cardiovascular9–12. Por servirnos de un ejemplo, prosigue, "un atleta con enorme masa muscular puede tener un IMC alto, lo que podría clasificarlo incorrectamente como obeso. Por otra parte, una persona con un IMC habitual podría tener un alto porcentaje de grasa en el cuerpo, lo que indicaría obesidad".